martes, 31 de julio de 2018

Somos la luz del mundo


"Hermanos, tengan paciencia hasta que el Señor regrese. Recuerden que el campesino espera con paciencia a que pasen las épocas de lluvia para que la tierra produzca frutos. Ustedes también deben esperar con paciencia. Manténganse firmes porque el Señor regresa pronto". Santiago 5:7-8

Uno de los significados de la palabra paciencia es calma o tranquilidad para esperar, que es el significado que hoy me interesa analizar conforme a la Palabra de Santiago 5:7-8 que nos habla de tener paciencia hasta la venida de Jesucristo, pero esta paciencia no solo trata de tiempo sino de nuestra actitud respecto del tiempo, implica nuestra firmeza y lealtad en Cristo, esto nos 
conlleva a una vida de entrega y sometimiento a Él y a su Palabra, a seguir dando frutos en toda buena obra, seguir creciendo en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo, y ser cada día fortalecidos en su poder.
La venida de Jesucristo está muy cerca de modo que debemos estar siempre preparados pues la verdad no conocemos el día ni la hora; pero hoy día estamos viendo las señales antes del fin del mundo, y del regreso de Jesucristo, que Jesús de Nazaret predijo y están escritas en la Biblia,  por eso podemos decir que el Señor Jesucristo está a las puertas!!!
Nosotros somos testigos de Cristo aquí en la tierra, que el mundo se convierta a nosotros y nosotros no nos convirtamos a ellos. Con nuestro fruto o testimonio mucho llegarán a Cristo. 

"Acérquense a Dios y él se acercará a ustedes. Quiten el pecado de su vida, pecadores. Concentren su mente en Dios, ustedes que quieren seguir a Dios y al mundo".  
Santiago 4:8

Un abrazo y muchas bendiciones.













miércoles, 25 de julio de 2018

La oración del Padre Nuestro


"Ustedes deben orar así: 'Padre nuestro que estás en los cielos, que siempre se dé honra a tu santo nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra como se hace en el cielo. Danos hoy los alimentos que necesitamos cada día, y perdona nuestros pecados como nosotros también perdonamos a los que nos han hecho mal. No nos dejes caer en tentación, sino líbranos del maligno" Mateo 6: 9 -13

Ésta enseñanza de Jesús era como la estructura o la base de como interactuar con el Padre Celestial, no se trata de hacerla repetitiva, aunque lo podemos hacer. 
Una de las cosas que Jesús vino a hacer en la tierra fue a restaurar la paternidad de Dios; recordemos que el pueblo de Israel por su rigidez y temor no le invocaban como Padre; es por ello que Jesús inicia la oración con las palabras de Padre nuestro.  
Al entrar en oración debemos entender que la presencia de Dios está allí a través de su Santo Espíritu, y que nosotros somos sus hijos; entramos en una relación personal con el Padre; y al dirigirnos a Dios como nuestro Padre, debemos darle reverencia y exaltación, y que la santidad sea en nosotros sus hijos, un estilo de vida que honre su nombre, para que sometiendo nuestra voluntad a su voluntad, Dios gobierne nuestra vida en todo el ámbito de la palabra, sustentando así nuestro día a día física y espiritualmente, enseñándonos a perdonar a través de su perdón y dándonos la capacidad de ser libres de la tentación y del mal mediante ésta relación Padre e hijos. 
Lo que busca Dios de nosotros es que tengamos una vida de oración, porque es allí donde aprendemos a conocerle, allí crecemos espiritualmente, y es allí que mediante su Palabra el Santo Espíritu de Dios va restaurando nuestra vida, quien está presente siempre, "y el Espíritu Santo nos ayuda en nuestra debilidad. Por ejemplo, nosotros no sabemos qué quiere Dios que le pidamos en oración, pero el Espíritu Santo ora por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras". Romanos 8: 26

Veamos algunas recomendaciones hechas por Jesús que debemos tener en cuenta al orar:

"Cuando oren, no sean como los hipócritas, que les gusta pararse en las sinagogas y en las esquinas de las calles a orar en voz alta para que los vean. Les digo la verdad: ellos ya han recibido su recompensa. 
Pero tú cuando ores, dirígete a tu cuarto, cierra la puerta y habla con tu Padre. Así recibirás recompensa de tu Padre, porque él ve todo lo que se hace en secreto. 
Cuando oren, no alarguen demasiado su oración. No hagan como los que no conocen a Dios, que creen que porque hablan mucho Dios les tendrá que hacer caso. No sean como ellos, porque su Padre sabe lo que ustedes necesitan, incluso antes de que se lo pidan". Mateo 6: 5-8 

Un abrazo y muchas bendiciones  






viernes, 20 de julio de 2018

Hambre y sed de Dios



 ¿A quién tengo en el cielo? ¡Solo a ti! Estando contigo nada quiero en la tierra. 
Salmos 73:25

Esta expresión del salmista nos muestra su entrega total a Dios, pero también la saciedad de Dios en su vida. Si de algo debemos estar seguros es que no hay nada fuera de Dios, Él lo suple todo; Él es la fuente de nuestra vida, sin Él nada podemos hacer y fuera de Él no existe nada, es la razón de nuestro existir.
A través de la meditación en la Palabra de Dios, nos damos cuenta que es allí donde nuestra alma tiene reposo porque el Espíritu Santo nos da entendimiento para comprender que sólo Dios puede suplir nuestras necesidades espirituales, físicas y materiales; que sólo Dios puede llenar nuestros vacíos, Él es el agua viva que sacia nuestra sed, Él es el pan de vida que sacia nuestra hambre. 
Toda angustia, toda depresión, toda ansiedad son reflejos de una vida de no relación con ese Dios vivo: Jesucristo, porque cuando se lleva esa relación personal día a día, Él lo llena todoporque en Él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y en Él estamos completos... (Colosenses 2: 9-10).  

En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y en voz alta dijo:"Si alguno tiene sed, venga a mi y beba. Del interior del que cree en mí, correrán ríos de agua viva, como dice la Escritura". Juan 7:37-38

Un abrazo lleno de bendiciones.