miércoles, 15 de diciembre de 2010

Jesucristo nuestra razón de ser


"ASI QUE,
SI EL HIJO OS LIBERTARE, SERÉIS VERDADERAMENTE LIBRES".
Juan 8:36






Jesucristo,  el hijo de Dios, es el único que puede librarnos de toda acción y pensamiento que estan por fuera de los parámetros de una vida de rectitud; no tenemos excusa  porque nuestra conciencia nos acusa  cuando algo no esta bien porque no estamos obrando con integridad, pues cuando deseamos lo que tiene otra persona, sea su esposa(o), o su empleada, o sus pertenencias materiales; estamos envidiando a esta persona  en nuestra forma común de ver las cosas; observemos que nos dice el mandamiento de Dios:
"No codiciarás  la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo" (Éxodo 20:17).
¿ Cuántas personas estamos dejando de cumplir con este mandamiento de Dios, ya sea en pensamiento o en obra? porque la envidia no es buena, nos mueve a pasiones desordenadas y malignas, y  no cumplir con el mandato de Dios es pecado. Y el único que puede hacernos libre de ésto es Jesucristo, porque no solamente  nos hace libre, sino que en Él esta la salvación y la vida eterna. Cuando le permitimos a Jesucristo entrar en nuestra vida, y le hacemos el Señor de nuestras vidas, es decir, cuando nos sometemos a Él, y le seguimos a través de su Palabra, nuestra vida es transformada, nos llena de su paz,  de su amor; es a partir de ese momento que podemos decir con todo nuestro corazón que Él es la razón de nuestro vivir, que fuera de Él no existe ningún bien y apartados de Él no existe nada, Él es nuestro fundamento.  
Deja que el sane tu corazón de malas actitudes y vive una vida recta por amor a Él, recuerda que Él murió por ti, por mi y por toda la humanidad.   Dale tu corazón y tus ojos miren por sus caminos (Proverbios 23:26). Escudriña las Sagradas Escrituras y conoce  la gran misericordia de Dios al darnos a su Hijo Jesucristo.
Bendiciones